Esta entrada se la dedico a mi pareja y compañera Patricia Busquets, que por razones de trabajo se ha perdido esta salida al HONDO DE ELCHE y el poder disfrutar de la visita de las águilas calzadas.
Con la noche aún despidiéndose dando paso a los primeros y tímidos rayos de Sol, llegamos al HONDO DE ELCHE donde hemos quedado con unos compañeros a los que ayudaremos en esta jornada de anillamiento,
El cielo aún engalanado de tonos naranjas, rojos y dorados despierta a la fauna del HONDO, donde las TÓRTOLAS encaramadas al esqueleto de un viejo árbol se acicalan y arreglan el plumaje...
Los embarcaderos abandonados parecen esperar tiempos mejores sumidos en un profundo letargo, dando al paisaje un aire romántico y melancólico, donde las fochas, zampullines, gallinetas y un sin fin de criaturas campean en el frescor de la mañana.
Poco después de comenzar con las capturas, nos sorprende la visita de un ÁGUILA CALZADA que decide hacernos compañía en un viejo chopo desnudo y nos brinda la oportunidad de sacarle unas cuantas fotos.
No tardan en aparecer otros ejemplares en el cielo del Hondo para deleitarnos con sus majestuosos vuelos.
La sorpresa de la mañana nos la da la aparición de un globo
aerostático que adorna el cielo azul con sus vivos colores.
Casi a punto de retirar las redes, nuestro amigo el MARTÍN PESCADOR queda atrapado.
A veces el desenredar a las aves resulta un tanto complicado y hay que tratar de
liberar al animal con todo el cuidado y causarle el menor estres posible.
Anillamiento del MARTÍN PESCADOR.
Toni Zaragozí a punto de liberar al MARTÍN PESCADOR.
FOTOGRAFIAS DE Miguel Angel Quereda.